Crónicas del viento ...

si se pudiera hacer del cuerpo
una canción,
liberado el espíritu
se confundiría con el viento...

que no tiene edades ni asiento
que lo obligue a estar en un sólo lugar,
o en esa dimensión sin tiempo-
Todo es cuestión de acerbo...

y de costumbres que se van perdiendo.
Pero el viento,
no tiene principio ni fin,
ni metas ni paraderos.

Se levanta a voluntad.
Camina por desfiladeros.
Riscos, montañas, valles, son su sendero.
Arrasa, destroza y se se le antoja...

ha de llevarse lo que poseemos.
Es como si en su grito quisiera advertirnos.
que nada de lo real es,
lo que supuestamente tenemos...

simples pasajeros somos y el viento,
sabe de eso.
Generaciones enteras lo han visto pasar,
ninguno osó detenerlo;
de su furia quedan reflejos...

que nadie quiere contar pués es triste su recuerdo.
Y no habrá mucho más que agregar
a estas crónicas en las que juego,
a delirar con el pensamiento entanto
huye de mi cuerpo,

para darme esa canción,
que yo escucho desde lejos,
que no está aquí ni allí, sino
fuera del tiempo,
en ese espacio que me circunda
de ideas, cuando
danzan con el viento.

Kris



MUCHAS GRACIAS POR TU COMENTARIO.
Un sueño más hecho realidad!