Silencio ...

Silencio...


En la desorbitada rueca de la vida,
me atropella el loco impulso del vivir!...
Pero estoy atrapada
dentro de una caracola marina
por los hilos de un destino
que no deseé ni presentí!...

Allí mis horas pasan
a la escucha del ruido del mar,
pero no puedo hamarcarme
en sus suaves olas, como
antes lo hiciera mi espíritu
fundida en un sueño dual.
El recuerdo de un placer imposible
me atormenta y no hay
nada que pueda hacer en mi soledad !

Sólo esperar! pero esperar qué ?
Ojalá.. supiera!
poner mis ilusiones
a navegar .
Más el camino es oscuro,
lleno de laberintos..
en el cual me pierdo
tras cada intento de libertad!

De pronto... alquien,
me sustenta, siento que me elevo,
y pareciera que me refresca
la brisa plateada del mar...
me asomo a su rivera...
veo su espuma en un grito,
tras estrellarse frente a la estéril roca
de arena negra, silicio y sal!

Es el llamado de mi alma...
pidiendo socorro!!!
clamando agonizante
por su libertad...
Más los vericuetos de nácar
oprimen mi cuerpo...
precioso sepulcro para descansar...

No quiero seguir encerrada,
deseo abrir mis alas, poder volar!
Surcar los cielos profundos,
contemplar desde arriba la belleza del mar!
Y cuando me sienta exausta
hendir mi cabeza entre sus aguas
y sobre su seno ondulante,
poder reposar....

que el graznido de las gaviotas
me susurren al oído,
y sea esta música la más celestial...
quiero liberarme de esta prisión
sin tino, romper las cadnas
que sujetan mi ansiedad...

¡ Sentirme a mis anchas
en un vuelo intenso!
Y con la punta de mis alas,
el abismo azúl poder rayar.
Dejar la huella de mi destino
como una estela sobre la mar...
y en un giro de media noche,
cuando la voluntad duerme...
en el silencio de mis abismos,
saber que la tierra... a mis piés está!

Kris